1852: Los orígenes. La historia del Grupo LACASA se inicia en la localidad oscense de Jaca, donde Antonio Lacasa fundó en 1852 un almacén en el que vendía tejidos, garbanzos y el chocolate que él mismo fabricaba. De hecho, los libros de cuentas de Antonio Lacasa, bisabuelo de los actuales propietarios, confirman la compra de grandes cantidades de azúcar, cacao y avellanas para la fabricación de este producto.
Finales del siglo XIX. José Lacasa Ipiens, hijo del fundador, decidió limitar la actividad de la empresa a la producción de chocolate y café. Cuando unos años después traspasó el negocio a sus hijos Joaquín y José María, lo hizo ya bajo la denominación de LACASA, una firma que para entonces ya contaba con 15 personas en plantilla. En 1885, LACASA recibió la primera distinción a la calidad de sus productos. En el marco de la Exposición Aragonesa, sus chocolates fueron premiados con la Medalla de Oro a la Calidad.
Primer tercio del siglo XX: el comienzo de la industrialización. LACASA se consolida en este periodo como el fabricante de chocolate más importante de la región. A finales de la década de los veinte, LACASA inicia la industrialización de sus procesos de trabajo, con la compra en Francia del primer tostador de café. Cinco años más tarde, en 1932, la maquinaria de la compañía aumenta con una pesadora, un molino de cacao y un nuevo tostador de café, lo que permite distinguir entre café natural y torrefacto, una gran novedad para la época. En 1928, LACASA fabricaba 500 kilos diarios de chocolate de cuatro variedades: a la taza,
con almendra picada, superior y extra superior.